Inicio Empresas y Negocios “Córdoba está absolutamente saturada de grandes superficies”

“Córdoba está absolutamente saturada de grandes superficies”

Aunque tiene perfil moderado y tono conciliador, Alberto Dragotto dispara frases contundentes a la hora de defender al sector al que representa. “Córdoba está absolutamente saturada de híper”, afirma. Pero, inmediatamente, aclara que no se opone a las grandes superficies sino a la falta de una reglamentación para su radicación.

Dueño durante muchos años de la emblemática perfumería Lido, ubicada en la primera cuadra de Rivera Indarte, Dragotto presidió entre 1985 y 1989 la Cámara de Comercio de Córdoba y ahora ocupa la vicepresidencia de la entidad, que el mes próximo cumplirá 75 años. También es secretario de la Cámara Argentina de Comercio, donde tuvo activa participación en la reciente discusión paritaria del sector. De profesión contador, se dedica a asesorar a empresas.

–¿Cómo está el sector en Córdoba?
–En términos generales la recuperación del sector comercio y servicios se viene dando desde mediados de 2003, con un crecimiento promedio del 3,5 por ciento anual. El último dato es el crecimiento en el primer cuatrimestre respecto igual período de 2006, que fue alrededor del 14 por ciento.

–¿Es un buen crecimiento?
–Sí. La actividad está en buen nivel; no es esa la preocupación que tenemos hoy. La política del Gobierno nacional es movilizar y calentar toda la economía. Hay una mejora incipiente en la distribución del ingreso que se va dando y que por lo tanto genera expectativas favorables y un mayor consumo.

–¿Qué rubros repuntaron más?
–Alimentos y bebidas es un producto que ha crecido muchísimo; artículos para el hogar; indumentaria; los automotores y la construcción. Son los que han tenido más incremento desde la devaluación a la fecha.

–¿Hay inflación contenida?
–Según los economistas, que son los que saben de esto, es una situación que realmente está latente. Desde nuestro sector hay un dato que es relevante y muy importante destacar. Si se analiza la serie de precios desde la devaluación a la actualidad el índice de precios mayoristas creció 209 por ciento, mientras que los minoristas 97,8 por ciento. Hay una importante contribución del sector con una absorción de costos no trasladados al consumidor minorista.

–¿Cómo está la rentabilidad?
–La rentabilidad en nuestro sector es variada, porque hay 232 rubros y subrubros que componen la oferta comercial y de servicios. Sería imposible hacer un análisis pormenorizado, pero en términos generales lo que señalaba antes es uno de los aspectos que ha afectado la rentabilidad. El incremento de los costos es importante y por otro lado todos sabemos que ha hay una política de control de precios que, evidentemente, limita la posibilidad de mejorar la rentabilidad del comerciante. Además hay dos rubros que siempre han constituido tradicionalmente los mayores costos del sector: alquileres y mano de obra. La oferta de alquileres en el casco céntrico hoy es limitada y está totalmente cubierta. Lo mismo los shoppings donde hay listas de espera en muchos de ellos. Y como hay mucha demanda, es un costo muy importante para quien no tiene local propio y son la mayoría.

–¿Están conformes con el resultado de la paritaria que otorga un aumento del 23 por ciento?
–Hemos tratado de hacer lo mejor posible para las empresas. Evidentemente hay ciudades y regiones del país que podrán absorber mejor que otras este incremento salarial. La realidad económica del país e incluso de ciertos sectores es diferente. Esperamos que Córdoba pueda absolverlo, pero somos conscientes que hay sectores que están en mejor condiciones que otros para hacerlo.

Los híper en el mundo

–¿Las grandes superficies o híper son una competencia fuerte?
–Allí hay una capacidad económica y un poder de compra que ha modificado un poco la estructura de la competencia. Los híper han invertido la posición dominante. Tradicionalmente el abastecedor del comercio ha sido la industria que tenía la posición dominante y fijaba las reglas de juego en el sector. Ahora, por la estupenda capacidad de compra que tienen los híper han pasado a tener la posición dominante. Son una competencia muy importante y en este punto del análisis no podemos dejar de referenciarlos con lo que es el contexto internacional, que en el comparativo es mucho más grave la situación en Argentina. En el mundo se mide un coeficiente de un híper cada 100 mil habitantes. Ese coeficiente es hoy en Argentina 3,3, similar al de Córdoba. Estamos absolutamente saturados. En Francia el coeficiente es 1,5; Alemania 1,3. España e Italia, 0,3 y 0,2 respectivamente. En estos países es donde hay reglamentaciones en dos aspectos que son muy importantes: la radicación y en que lugar se ubican y en los horarios. En esos países hay intervenciones del Estado que, evidentemente, han defendido la posición de los comercios tradicional de proximidad, tan importante en el entramado social de la ciudad.

–¿Cuál es la postura del sector frente a los híper?
–No nos oponemos a los híper. Creemos que no se pueden seguir generando habilitaciones sin los análisis correspondientes. El índice da que realmente hay una excesiva oferta de cara a la ciudad. Que se haga un análisis ambiental, poblacional, de cómo está el sector. Una serie de variables que en el mundo se estudian y son matrices que están hechas; no tenemos nada que inventar, antes de tomar decisiones de este tipo. Creemos que las reglas de juego no son parejas. Estamos haciendo con la consultora MKT un estudio del impacto que tiene el último híper inaugurado en el ala de la ruta 20 sobre esa zona comercial y el que tendrá otro mall que se prevé construir en la recta Martinoli.

–Además de los híper, cuales son los principales problemas que tienen?
–El principal problema es que, desde todos los niveles del Estado, somos vistos meramente como contribuyentes, con una actitud de política fiscal. El sector tiene una gran importancia como generador de ingreso para el Estado, fundamentalmente provincial y municipal. La recaudación provincial hoy está asentada, fundamentalmente, en el impuesto más regresivo que existe que es el impuesto a los ingresos brutos. El sector comercial está aportando a esos ingresos propios de ambas administraciones, tanto provincial como municipal, dos tercios de los recursos. Sin embargo no hay políticas de apoyo para el sector, salvo casos muy puntuales y excepcionales.

–¿Y qué le reclaman a la Provincia?
–Más que reclamos tenemos expectativas como el principal sector generador de empleos en el país. No planteamos subsidios, pero queremos políticas de Estado que sirvan de apoyo. Por ejemplo, no hay un nivel de registros sobre cuál es la oferta comercial y de servicios que tiene la ciudad y la provincia de Córdoba.