Las copas de brindis chocarán en la noche de navidad y fin de año con un cóctel de deseos que cada argentino esperará que se cumpla en 2010.
Para conocer cuáles son las prioridades, TNS Argentina realizó una investigación a nivel nacional que revela los intereses de cada persona tanto a nivel colectivo como individual.
Al preguntar de manera espontánea qué es lo que desean para el año próximo, resulta que el principal deseo de la población es que haya trabajo y que las condiciones de los mismos sean mejores. Un 50% de la gente coincide en la opinión.
Un 32%, se inclino por pedir que mejore la situación del país, mientras que el 26% tiene en primer lugar el bienestar y la salud familiar.
La amplia mayoría de los entrevistados, el 75%, manifiestan que a la hora de decidir entre salud, dinero y amor, prefieren la salud. Mucho más atrás le sigue el amor (14%) y finalmente el dinero (8 por ciento).
Pero al preguntar cuál de estas tres cuestiones es la que más le hace falta, el dinero se ubica en primer lugar con 6 de cada 10 menciones (59%). Muy por detrás aparecen el amor (13%) y la salud (9%), mientras que 2 de cada 10 declaran que no les hace falta ninguno de estos tres deseos.
Constanza Cilley, Gerente General de TNS Argentina, explicó que “el estudio muestra que junto a cuestiones básicas como trabajo y salud, los argentinos desean una mejora en la situación del país para el año venidero. También el deseo de bienestar familiar concuerda con otros estudios de TNS que reflejan una alta valoración de esta institución en nuestro país.”
Otros deseos
Además de la situación laboral y la salud de la familia, la seguridad ocupó un lugar entre los deseos de la gente.
Es así como 2 de cada 10 entrevistados lo incluyeron como un deseo para el 2010.
Al analizar los deseos de la población por segmentos sociodemográficos, se observa que:
* El deseo que haya más trabajo/ mejores condiciones de trabajo es más frecuente a menor edad de los entrevistados (56% entre los jóvenes de 18 a 24 años, contra 40% entre los mayores de 64 años), crece también en el nivel socioeconómico más bajo (53% vs. 44% en la clase media y 40% en los sectores altos) y entre los residentes del Gran Buenos Aires y del Interior del país (49% y 52% respectivamente vs. 35% en la Capital Federal).
* Que mejore la situación del país fue mencionado principalmente por las personas de mayor edad alcanzando un 43% entre las personas con más de 64 años, mientras que entre los jóvenes de 18 a 24 años desciende a 18%.
* El bienestar/ salud familiar es un deseo que tiende a crecer a menor nivel socioeconómico (27% en el nivel más bajo vs. 20% en los más altos).
* Los deseos personales -ya sea comprar o remodelar una casa, comprar un auto, viajar, mejorar la condición de pareja o casarse, entre otros- encontraron mayor cantidad de adeptos entre los jóvenes (34% entre los de 18 a 24 años vs. 12% entre los mayores de 64 años) y las personas de los sectores socioeconómicos más altos (33% vs. 17% en los sectores bajos).
* Los segmentos que mostraron mayor interés por mejorar la seguridad fueron las mujeres (21% vs. 13% entre los hombres) y los residentes del Gran Buenos Aires (20% vs. 17% entre los del Interior y 13% en la Capital Federal).
La salud, antes que el dinero o el amor
Al indagar entre los argentinos cuál deseo es el que prefieren entre salud, dinero y amor, la proporción de personas que eligen la salud crece entre los mayores de 64 años y las personas de menor nivel socioeconómico (77% vs. 66% en la case alta). En cambio, quienes prefieren el amor son más frecuentes a medida que aumenta el nivel socioeconómico (21% en la clase más alta, contra 12% en la más baja) de los entrevistados.
“Salud es lo que quiero, dinero es lo que me hace falta”, explican. Eso responde casi el 60 por ciento.
Son los jóvenes de 18 a 34 años quienes declararon en mayor medida la falta de dinero, lo que también aumenta significativamente en los sectores socioeconómicos más bajos (64% vs. 33% en las clases altas).
Las declaraciones acerca de la falta de salud crecen entre los mayores de 65 años (22% vs. 6% entre los más jóvenes) y a menor nivel socioeconómico (10% en los sectores más bajos vs. 4% en las clases altas).
En tanto, la falta de amor fue mayoritariamente mencionada por los jóvenes de entre 18 y 24 años (19% vs. 9% entre los mayores de 64 años) y los sectores socioeconómicos más altos (24% vs. 10% en los sectores más bajos).
Por último, la proporción de personas que manifestaron estar satisfechos, es decir, que no les hace falta ninguno de estos tres elementos, alcanza a 4 de cada 10 en los sectores socioeconómicos más altos, contra 1 de cada 10 personas en los más bajos.
