Inicio Empresas y Negocios El dólar se convierte en el pedal de la “bicicleta financiera global”

El dólar se convierte en el pedal de la “bicicleta financiera global”

El euro y otras monedas con altos retornos están en posición de seguir avanzando frente al dólar esta semana, incluso cuando datos poco alentadores sobre el empleo en Estados Unidos ensombrecen la recuperación económica global

Según publica The Wall Street Jounal, los inversionistas necesitan un lugar donde colocar el dinero barato que abunda en sus portafolios, cortesía de las políticas sumamente laxas con las que la semana pasada la Reserva Federal de EE.UU. y otros bancos centrales volvieron a comprometerse.

Mientras los inversionistas sigan teniendo la certeza de que los banqueros centrales mantendrán el flujo de dinero barato, el efectivo continuará canalizándose hacia operaciones más riesgosas, incluidos las monedas y los bonos con altos rendimientos, señalan los analistas.

“Ninguno de los bancos centrales del Grupo de los Tres se apresura a retirar liquidez”, dijo Steven Englander, estratega jefe de moneda de EE.UU. en Barclays Capital en Nueva York, respecto de los bancos centrales de EE.UU., la zona euro y Japón. Y añadió: “Durante el resto del año, los mercados sentirán alivio por esa situación”, e impulsarán hacia arriba los activos riesgosos.

En un informe a ministros de finanzas y gobernadores de bancos centrales del Grupo de los 20 principales economías, el Fondo Monetario Internacional afirmó que hay indicaciones de que el dólar se está utilizando como moneda de financiación en operaciones de “carry trade”, o bicicletas financieras, una estrategia en la que los inversionistas toman prestado en divisas que se prevé que tendrán tasas de interés bajas a mediano plazo para comprar monedas tendrían tasas más altas.

“Estas operaciones podrían estar contribuyendo a presionar al alza al euro y algunas monedas de economías emergentes”, señaló el FMI. “El euro ha experimentado la mayor apreciación entre las monedas de las principales economías avanzadas y sigue del lado fuerte de su equilibrio”.

Pero funcionarios del G20 no dieron indicaciones de que fueran a tomar medidas que obligaran a los inversionistas a repensar sus bicicletas financieras. Su declaración final no mencionó a las divisas, y las conversaciones sobre temas cambiarios al margen de su reunión en St. Andrews, Escocia, parecen haber sido limitadas.

El FMI se sumó a la presión sobre el gobierno chino para que permita que el yuan se aprecie, al describir a la moneda como “significativamente subvaluada”.

Pero el secretario del Tesoro de EE.UU., Timothy Geithner, afirmó que las tensiones con China sobre la política monetaria no están aumentando, mientras que funcionarios chinos repitieron su llamado por un dólar estadounidense estable.

El euro debería subir esta semana, pero no demasiado lejos de sus rangos recientes, afirmó Andrew Chaveriat, estratega técnico de divisas extranjeras de BNP Paribas en Nueva York. El euro debería cotizarse entre u$s1,4675 y u$s1,49, mientras que el dólar se movería entre 89,30 yenes y 92 yenes, según Chaveriat.

El progreso irregular de la recuperación económica global, evidenciado en las decepcionantes cifras de empleo de EE.UU. difundidos el viernes, en las que el desempleo superó 10% por primera vez en 26 años, lleva a algunos inversionistas a preguntarse si las acciones, las monedas que ofrecen altos retornos y otros activos riesgosos pueden continuar subiendo.

Pero las decisiones de la semana pasada tomadas por la FED, el Banco Central Europeo y el Banco de Inglaterra de continuar inundando el sistema financiero global con dinero fácil significa que la “racha de riesgo” aún tiene camino por recorrer, señaló Englander, incluso cuando es probable que las ganancias disminuyan gradualmente tras las fuertes alzas observadas cuando la economía salió del punto más álgido de la crisis financiera.

El euro podría volver a estabilizarse por encima de u$s1,50, los commodities podrían continuar avanzando a su ritmo desenfrenado y las acciones pueden continuar su repunte desde sus mínimos post-Lehman Brothers, mientras los bancos centrales mantengan el flujo de dinero, afirmó.