Se incrementó más de 120% entre 2001 y 2006, mientras los sobreprecios en medicamentos dejaron márgenes de ganancias hasta en “33 mil por ciento” en fármacos, según fuentes del sector
Un estudio de la Asociación de Agentes de Propaganda Médica (AAPM) mostró que los medicamentes más consumidos por la población presentan elevados precios finales en relación al costo de la droga.
A modo de ejemplo, la AAPM citó el caso de un conocido ansiolítico producido por un laboratorio extranjero, cuyo precio final superó en 2.258% el costo de la droga utilizada para su elaboración.
A su vez, la versión nacional del mismo ansiolítico, pero producido por un laboratorio argentino, mostró que el precio final superó en 2.165% el valor de la droga usada, en el período comprendido entre 2001 y 2006.
El informe “Caracterización de la Industria Farmacéutica en el contexto de la ausencia de un marco regulatorio” fue realizado por el Instituto de Estudios sobre Políticas de Salud de la Asociación de Agentes de Propaganda Médica (AAPM) y relevó la actividad del sector entre 2001 y 2006.
En el trabajo participaron el economista Tomás Raffo y los visitadores médicos José Charreau y Ricardo Peidro, integrantes de la AAPM.
El relevamiento mostró que los principales laboratorios extranjeros imputaron un precio mayor por el mismo medicamento que vendieron en Argentina, respecto del valor que cobraron en el exterior.
El estudio aludió a un laboratorio extranjero que vende en España y Argentina medicamentos oncológicos, para tratamiento del HIV y para hepatitis, que son “altamente costosos y sensibles para la población”, manifestaron los autores del relevamiento.
En ese sentido, afirmaron que “el laboratorio imputa en Argentina un precio que supera entre un 60 y 90 por ciento el valor del mismo medicamento en España”.
El relevamiento reportó la existencia de un listado de 29 medicamentos para patologías graves, de altos costos, que representan 20% de la facturación de los laboratorios.
“No figuran en el Manual del Farmacéutico ni tienen control, lo que deriva en una discrecionalidad en sus valores de mercado”, expresó el estudio.
El informe de la Asociación de Agentes de Propaganda Médica mostró que la mayoría de empresas de origen local representan el 71,3% de los laboratorios, pero tienen una menor participación en el monto global de facturación, el 54,5% del mercado.
Sin embargo, los laboratorios de origen extranjero representan 28,7% del mercado, pero participan del 45,5% de las ventas globales del sector, sostuvo el relevamiento de la AAPM.
El reporte mostró que el 86,3% de la producción de medicamentos en la Argentina se distribuye por droguerías, y tres de ellas son propiedad de los principales laboratorios que comercializan más del 60% de los remedios de distribución mayorista.
El estudio de la AAPM reveló que la industria farmacéutica facturó $3.652 millones en 2001, cifra que en 2006 ascendió a 8.074 millones de pesos.
En ese sentido, sostuvo que la facturación del sector creció en más de 120% y los sobreprecios en los medicamentos dejaron ganancias de hasta “33 mil por ciento” entre 2001 y 2006.
El secretario general adjunto de la AAPM y secretario de Derechos Humanos de la Central de Trabajadores Argentinos (CTA), Ricardo Peidro, manifestó que “el comportamiento vigente de las empresas productoras de medicamentos es el resultado de la ausencia de un marco regulatorio del Estado”.
Peidro se mostró a favor de la regulación de los precios de los medicamentos por parte del Estado, para que “imponga condiciones que atiendan el interés público en un área estratégica para la salud de la población y para gestar condiciones de desarrollo tecnológico de punta”.
