Los fracasos pueden ser graves, fatales y des-estructurantes y sobre todo inevitables. Para otras personas sin embargo los fracasos representan una oportunidad de oro para aprender. Sin embargo pocas personas son capaces de admitir que un fracaso puede ser bueno y agregar valor.
Lo que pasa es que nuestra cultura está inmersa en la cultura del éxito. Solo se habla sobre quien es la gente exitosa y se las usa de paradigma y ejemplo, pocas veces se cuenta cuantas veces esas personas fallaron en alcanzar sus objetivos.
Para el culto ciego del éxito pareciera que nadie comete errores. Sobre todo dentro del ambiente corporativo, nadie habla de ese tema.
Si lo hacen, lo disfrazan de tal manera que usted termina confundido y no sabe si están hablando de un logro o se están refiriendo a otra situación.
Claro que es comprensible, pues en ese tipo de ambiente cualquier estupidez por muy pequeña que sea puede tener consecuencias catastróficas.
Nada más fíjese en este ejemplo: BP le ha ido bastante mal con el tema del derrame petrolero, incluso las acciones de la empresa se afectaron por ese asunto, pero ahora se habla de que las petroleras van a desarrollar tecnologías para poder lidiar con ese tipo de problemas en el futuro.
Lo que se pudo haber ideado o construido antes, ahora es una necesidad que va a agregar valor a las empresas que desarrollen sistemas de explotación alternativo que no atenten contra el medio ambiente.
Siempre ha sido así en la historia de la humanidad, de hecho cada vez que hay un terremoto devastador lo primero que hacen los ingenieros es estudiar que fue lo que falló y con base en eso preparan el nuevo estado del arte en construcción.
Los individuos, empresa u organizaciones que no saben lidiar con el fracaso demuestran que son inmaduros, inseguros, poco francos y emocionalmente no están preparados para aprender de los errores.
El fracaso es una oportunidad de oro para que usted aprenda a hacerlo mejor, siempre que tenga la actitud correcta ante ese tema.
Recuerde lo que decía Einstein sobre la insensatez o locura: hacer las cosas siempre de la misma manera y esperar resultados diferentes, es cosa de locos.
Si usted repite constantemente los errores, en vez de estar agregando valor y aprendiendo, usted simplemente es un insensato o tal vez un loco. Piense en eso.
