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La importancia de un cambio de estilo de vida y un tratamiento eficaz

Según datos de la OMS (Organización Mundial de la Salud), en el año 2005, 1.6 billones de personas adultas presentaban sobrepeso y al menos 400 millones obesidad. Actualmente, se estima que para el año 2015, aproximadamente 2.3 billones de adultos tendrán sobrepeso y 700 millones serán obesos.

Estos datos fueron difundidos en el último Congreso Argentino de Gastroenterología y Endoscopia Digestiva realizado en Buenos Aires, en donde se determinó que la obesidad, no sólo afecta el bienestar y la salud sino que, suele ser la primera causa de enfermedades como: hipertensión, diabetes, problemas articulares y apnea, entre otras.

“Hoy en día, la obesidad y el sobrepeso alcanzan cifras alarmantes en todo el mundo. Esta enfermedad es producto de una mala alimentación y del sedentarismo; dos factores que afectan y dañan la salud de las personas de forma progresiva”, afirma el Dr. Luis Caro, Director Médico de Gedyt y Jefe de Gastroenterología del Instituto Alexander Fleming.

El especialista sostiene que “la obesidad es una enfermedad crónica, que requiere para su mejoría cambios permanentes en el estilo de vida de cada persona. Es necesario brindarle al paciente la mayor información en cuanto a los diversos tratamientos y la importancia de llevar una vida saludable para evitar la incidencia de nuevas enfermedades”.

Tratamiento eficaz
Actualmente, existen varias alternativas y tratamientos para combatir la obesidad y el sobrepeso, que tienen como fin prevenir ciertas enfermedades y mejorar la calidad de vida y el bienestar de las personas.

La aplicación del balón intragástrico es una nueva y certera alternativa que favorece la reducción de peso de una forma no invasiva, sin necesidad de cirugía ni internación y en un corto plazo.

Este procedimiento, explica el Dr. Caro, “es un recurso médico simple e innovador, que ayuda al paciente a perder peso y, más importante aún, a cambiar sus hábitos y conductas de alimentación que mejoren su organismo y al mismo tiempo ayuden a prevenir ciertas enfermedades”.

“El principal beneficio del balón es que, una vez colocado en el estómago, permite al paciente reeducar su conducta alimentaria, reducir notablemente las porciones de alimentos e incorporar hábitos saludables. La colocación dura aproximadamente 30 minutos, no requiere días de internación y, además, no es agresivo ya que no modifica la estructura del estómago”, afirma el especialista.

Para obtener éxito en el tratamiento del balón intragástrico, es fundamental hacer un seguimiento adecuado del paciente, teniendo en cuenta que el tratamiento debe ir acompañado de una dieta nutritiva y equilibrada, pero por sobre todo con un seguimiento del equipo multidisciplinario.

“El trabajo en equipo entre el endoscopista y su equipo es fundamental a la hora de decidir la colocación del balón intragástrico, porque son quienes deben evaluar cada caso y supervisan todo el proceso, donde también es conveniente el aporte de nutricionistas, endocrinólogos, cardiólogos y psicólogos”, concluye el Dr. Luis Caro.

El balón está especialmente indicado para:

* Pacientes mayores de 18 y menores de 60 años.
* Pacientes con un Índice de Masa Corporal (IMC) de 26 a 35 (NOM).
* Pacientes con un IMC mayor a 45, con morbilidad.
* Pacientes con sobrepeso u obesidad mórbida (casos especiales como preparación previa para cirugía-Puente).
* Mujeres que tengan que perder peso para buscar un embarazo.
* Pacientes que no sean candidatos a una cirugía de obesidad.