Inicio Empresas y Negocios Leve caída de la construcción en marzo

Leve caída de la construcción en marzo

Analistas y empresarios de la construcción consideran que esta actividad atraviesa una meseta alta, ya no una montaña empinada, aunque presumen algo de recuperación. El mes pasado, el indicador que elabora el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) bajó el 0,3% en relación con marzo de 2006 y el 6,1%, desestacionalizado, en comparación con febrero último.

El Indec atribuyó la caída -la segunda internual desde diciembre y la sexta respecto al mes anterior, desde agosto- a “una anormal cantidad de días de lluvia en importantes centros urbanos”. Más allá de la meteorología, ya no se crece a un ritmo de dos dígitos, como hasta la primera mitad del año pasado, sino que la expansión ahora es lenta, aunque de ninguna manera analistas y empresarios piensen en una recesión. En el primer trimestre de 2007, la actividad se incrementó un 3,7% respecto del mismo período del año anterior.

“A mí me encanta que el mercado esté en una meseta, pero alta, sostenible, y no en un boom de fantasía con patas de cera”, opinó el presidente de la desarrolladora inmobiliaria Farallón, Ernesto Gutiérrez. “Algunos hablan de que vivimos una burbuja, como Estados Unidos o España. Pero el mercado español tiene sustento en la exportación de viviendas, con los extranjeros invirtiendo en el Sur, y en que más del 90 por ciento son operaciones con crédito, cuando acá no llegan al 10”, agregó Gutiérrez. “El boom argentino fue por ingresos reales y no apalancados en el sistema financiero”, dijo el economista Juan Massot, de la Universidad del Salvador.

Para el segundo trimestre de este año, más cercano a las elecciones y tradicionalmente de mayor obra pública que el primero, los empresarios que trabajan con el Estado son optimistas: el 38% anticipa más actividad y el 54%, que se mantenga el ritmo, al tiempo que el 8% avizora una disminución. Entre los que se dedican a la obra privada, cuatro de cada cinco descartan cambios y el resto predice una aceleración.

Otro indicador clave para el futuro, la superficie por construir registrada por los permisos de edificación para obras privadas en 42 municipios, se elevó el mes pasado un 29%. El aumento se explica por los proyectos de edificación de viviendas y oficinas, según el Indec.

Entre los principales factores que estimularán la construcción en el segundo trimestre figuran la mayor inversión en obras privadas, la estabilidad de precios, los nuevos planes de obras públicas y la reanudación de otras. En cuanto al tipo de obra que alentará la actividad, figuran las viviendas, las obras viales y de pavimentación, y los edificios comerciales.

Los empresarios dedicados a la obra privada opinan que el sector necesita créditos para construir e hipotecarios, para la venta. Entre los que trabajan en obras públicas no sólo piden financiamiento para ellos, sino también estabilidad laboral.

“La tendencia es a una desaceleración relativamente importante, pero no a una recesión”, observó Horacio Costa, de DPA Consultores. Advirtió que la inflación no favorece el endeudamiento hipotecario y que la expectativa de menores subas de precios de las propiedades incidirá en la inversión de renta.

No obstante, Costa prevé que la desaceleración puede atenuarse porque el campo tendrá una cosecha récord y suele invertir en ladrillos. Massot, en tanto, confía en el efecto positivo del aumento del empleo y de los salarios.