Inicio Empresas y Negocios Para superar crisis, cada vez más las compañías recurren al counseling laboral

Para superar crisis, cada vez más las compañías recurren al counseling laboral

El surgimiento de nuevos contratos fue recibido por todos como una excelente noticia, hasta que se vieron desbordados por el crecimiento. Como si fuera poco, en plena vorágine de expansión, falleció el presidente y líder de la empresa.

En consecuencia, una conocida compañía de servicios médicos de zona sur se tuvo que enfrentar a este hecho que se desencadenó a mediados del año pasado. Sobrepasados por la situación, los directivos decidieron que era hora de recurrir al “counseling laboral”.

Así se iniciaron en un proceso que llevó más de cuatro meses y que demandó un riguroso trabajo conjunto, coordinado por asesores y expertos en consejería psicológica y organizacional.

El diagnóstico fue claro: crisis de crecimiento. El tratamiento incluyó la selección de nuevo personal y el rediseño del organigrama completo de la compañía. Finalmente, el desenlace fue fructífero: la empresa continuó su crecimiento de forma organizada y hoy cuenta con sucursales en toda la provincia.

Como esta, en la Argentina cada día son más las empresas que recurren al counseling laboral para solucionar sus problemas internos. Pueden tratarse de inconvenientes a nivel organizativo o de cuestiones personales de sus empleados que afectan su desempeño en el trabajo.

“En el país el crecimiento del counseling viene siendo sostenido desde el surgimiento de la profesión a nivel local”, asegura Eduardo Blacher, presidente de la Asociación Argentina de Counselors.

Según el experto, “el counseling para empresas tiene una participación cada día más importante, ya que trabaja sobre la potencialidad de las personas y los grupos para obtener lo mejor de sí con rendimientos sostenibles en el tiempo”. Así, agrega:”El counseling sirve tanto para la resolución de conflictos interpersonales como intrapersonales”.

Pese a haber experimentado un aumento sostenido desde principios de la década del 90, los especialistas consultados por infobaeprofesional.com aseguran que el counseling tuvo su auge a mediados de 2005, impulsado principalmente por la demanda de las empresas familiares.

En este sentido, Andrés Sánchez Bodas, director del Centro de Servicios de Counseling Epogé, afirma que ” las primeras en comenzar a solicitar el servicio fueron las compañías medianas de tipo familiar, principalmente por problemas vinculados a la muerte de sus dueños y la posterior sucesión”.

Según el especialista, esta metodología después se trasladó a empresas más grandes, fundamentalmente para trabajar sobre los niveles gerenciales en temas como desarrollo de carreras, outplacement y armado de equipos de ventas.

Pero ¿Qué es el counseling?
La tarea general del counseling consiste en crear clima, desarrollar la comunicación y afianzar los vínculos para, a partir de allí, descubrir dónde está el problema que mantiene estancado o paralizado al grupo.

La metodología clásica del counseling laboral es muy similar a una psicoterapia; la diferencia está únicamente en su objetivo, ya que no busca descubrir patologías sino facilitar la creación de un vínculo y así impulsar el desarrollo de las personas.

“Un counselor – señala Sánchez Bodas- no va a indicar caminos sino a facilitar que la persona y el grupo encuentre la perturbación y así pueda descubrir el camino por sus propios medios”.

Según los especialistas, el counseling se hace necesario en aquellas empresas donde existan conflictos en la bajada de instrucciones de funcionamiento, problemas personales entre grupos de trabajo, cambios de titulares o que hayan sufrido lo que se denomina incidentes críticos: accidentes graves, catástrofes o muerte de alguno de sus integrantes.

“El conflicto es inherente al ser humano, por lo tanto lo que hay que hacer es trabajar sobre la resolución más rápida posible del conflicto, para que la empresa no se vea perjudicada”, señala Blacher.

Los especialistas coinciden en que el counseling puede ser aplicado tanto en grandes como pequeñas empresas y en cada uno de los niveles de la organización, desde directivos hasta operarios.

En este sentido, los counselors señalan que, aunque a muchas compañías aún les cuesta reconocerlo abiertamente, el counseling es un servicio que cada vez más empresas nacionales tienen en cuenta, sin distinción de rubro o actividad comercial.

De hecho, las fuentes consutaldas aseguran que hoy en la Argentina lo aplican desde grandes compañías de seguros, aerolíneas, empresas alimenticias y hasta incluso canales de televisión.

Origen
El counseling laboral nació hace más de cincuenta años en Europa y Estados Unidos y de allí comenzó a expandirse gradualmente por el resto del mundo.

En la Argentina la disciplina se inició en 1992, con la creación del primer instituto de formación de profesionales en counseling. Desde esa fecha hasta hoy, el surgimiento de nuevos centros de educación para counselors creció de forma ininterrumpida.

En la actualidad, existen en el país más de 20 institutos que ofrecen la carrera de counselor, que además cuenta con una gran demanda laboral.

Aunque en ocasiones se tiende a confundir el counseling con el coaching, la diferencia entre ambas disciplinas es amplia.

Al respecto, Ricardo Sotillos, director del Instituto Argentino de consultores psicológicos, explica que “el coaching se basa en entrenamientos de conductas concretas, relacionadas en general con la venta, en cambio el counseling trabaja sobre la persona para mejorar sus relaciones laborales en general y de forma duradera”.

Pese a que en el mundo desarrollado la mayoría de las compañías cuenta con gabinetes internos de counseling dentro de su staff, en la Argentina esta práctica todavía no ha sido demasiado difundida. En general las empresas locales prefieren la contratación de consultores o asesores externos.

Sin embargo, Sotillos recomienda: “Toda empresa que tenga un departamento de Recursos Humanos debería tener counselors, porque en todas las compañías existen personas que tienen crisis. Por eso se hace necesario un counselor que pueda mediar y aceitar las relaciones interpersonales. Es importante entender que mientras mejor se sientan sus integrantes, mejor va a funcionar la empresa”.