Cerca de cien personas participaron del segundo desayuno de capacitación y actualización del año realizado por la Asociación Argentina de Logística Empresaria (ARLOG). El eje de la reunión fue la situación del mercado de consumo y las expectativas con referencia a la evolución para el año en curso.
Luego de la presentación, a cargo de José Luis Losada, ex presidente de ARLOG, quien ofició de moderador, Fernando Surban, gerente de la consultora Nielsen para la Argentina, Uruguay y Paraguay, presentó un estudio sobre el comportamiento del consumo desde la crisis y sobre las expectativas de desarrollo.
Surban afirmó que el consumo doméstico “seguirá creciendo a mayor ritmo que en el resto de la región”. De hecho, vaticinó un alza del 6 por ciento, aunque aclaró que esa estimación puede variar debido al reciente lock-out de las entidades agropecuarias.
Por otra parte, el experto agregó que “el freno en el aumento del índice de precios al consumidor constituye uno de los principales desafíos del Gobierno”. No obstante, indicó que “pese al aumento de los precios en el último bimestre del año pasado se aceleró el consumo”. Todas las categorías crecieron más que en 2006, añadió, y “la que logró mayor desempeño fue la de “bebidas isotónicas y aguas saborizadas”.
En cuanto al consumidor, Surban sostuvo que “se maneja por percepciones y no por realidades. Los argentinos continúan siendo más optimistas que el promedio regional pero con un importante retroceso”. En ese mismo sentido, indicó que “los argentinos gastan más en ropa (46%), salidas y entretenimientos (38,9%) y electrodomésticos”.
Por último, añadió que “las primeras marcas continúan ganando terreno”. Además, subrayó “la importancia del rol de la mujer y los niños en el momento de la compra”. Y concluyó respecto de los canales de consumo señalando que “se prevé un crecimiento del supermercado y un mayor aporte del almacén”.
Pronósticos para el sector
Luego fue el turno de Rafael Aragona, titular de Celsur y de Itsa Logística. Tras detallar las variables exógenas -los planes de infraestructura, la situación global de la economía, el escenario gremial, el crédito, la tasa de cambio y los programas de apoyo a la inversión, las comunicaciones- y endógenas –especialización, inversión en tecnología y programas de calidad- que impactan sobre el sector logístico estimó que para los próximos cinco años se espera “un bajo nivel de inversión en infraestructura de almacenes, inmadurez en la oferta y la demanda y canales inestables”.
Aragona agregó que los costos y los precios del sector “subirán por encima de los niveles inflacionarios”. Por lo tanto, recomendó “apoyarse en los nichos desarrollados”. Además, añadió que “una de las posibilidades a tener en cuenta es el desarrollo inteligente de integraciones con los procesos periféricos, por ejemplo los procesos de cobranzas electrónicas”.
A modo de conclusión, el ejecutivo manifestó que en dicho plazo “el sector logístico crecerá por encima del PBI”, aunque con cierto grado de incertidumbre y “con escasa visibilidad de apoyo estructural al sector”. Subrayó el rol de los integradores versus los operadores de nichos especializados y agregó que “es un área a mirar con mucha profundidad”.
Por último, afirmó que “en los próximos años habrá un mercado de demanda en transformación, especialmente en las áreas de comercialización y los canales”, lo que dará lugar a “posibles turbulencias de acomodamiento en los procesos logísticos que la acompañen”.
