Los ladrillos que hoy bloquean los arcos de la Bodega Tomba desde calle San Martín podrían ser reemplazados por vidrio en los próximos meses para permitir ver en el interior un paseo de compras. El proyecto, en el que han trabajado en forma conjunta la empresa propietaria del inmueble y la comuna, contempla el reciclaje de las fachadas externas e internas del edificio para crear un espacio con locales comerciales, gastronómicos y un museo y salón cultural.
Lo único que queda actualmente de la bodega es el núcleo fundacional -que data de fines del siglo XIX- e incluye cuatro naves o edificios, ubicados en la esquina de Rivadavia y San Martín. Esa construcción fundacional, sin embargo, se fue ampliando en sucesivas etapas hasta abarcar un predio equivalente a 4 manzanas, que alcanzaba la esquina noroeste de la plaza departamental. Además, su área de influencia se extendía hasta Lencinas y Belgrano, ya que en el entorno inmediato vivían los empleados de la empresa.
Al terreno también ingresaba el tendido del ferrocarril, que circulaba por calle Belgrano y atravesaba la propiedad de la familia Tomba en sentido oeste-este, para retomar la calle y pasar por otras dos bodegas del departamento: Arizu y Escorihuela.
El jefe del Departamento de Patrimonio Cultural de la comuna, Marcelo Nardechia, explicó que Godoy Cruz “nace” con estos grandes establecimientos vitivinícolas, ya que en los alrededores no sólo se instalaban los trabajadores, sino también quienes ofrecían servicios complementarios.
Años más tarde, y por diversas razones, la mayoría de estas empresas quebró y, como la ciudad había crecido hasta envolverlas y transformarlas en bodegas urbanas, se volvió más rentable demolerlas y aprovechar el alto valor de los terrenos para desarrollar otros emprendimientos.
Esto ocurrió con un sector importante de la Tomba -que, por sucesiones, había pasado a denominarse El Globo- cuando se construyó el hipermercado Metro Max (hoy, Libertad). A principios de los ’90, y por poco más de un año, se había reciclado la nave de la fermentadora para abrir en un espacio poco convencional: la discoteca Forum. Pero el proyecto sólo duró hasta que se puso en marcha la obra del centro comercial, ya que el lugar que ocupaba este edificio se destinó a la playa de estacionamiento.
Pese a eso, una parte importante (en el sentido de que es la bodega originaria, aunque sólo se trate del 25% de las edificaciones que llegó a tener) quedó abandonada y relegada a depósito de elementos en desuso de la empresa Pedro López e Hijos. Sin embargo, el año pasado la comuna se puso en contacto con los propietarios y comenzaron a trabajar en un proyecto de recuperación y puesta en valor del inmueble. El municipio ya completó un relevamiento del edificio, con la colaboración de 10 pasantes, alumnos avanzados de Arquitectura de la Universidad de Mendoza. Por otra parte, esperan el resultado de una verificación estructural que realizan técnicos del Cricyt y están trabajando en la declaratoria de interés patrimonial y cultural.
Sin embargo, Nardechia subrayó que no pretenden que el edificio quede protegido y abandonado, como ocurrió en su momento con la bodega Arizu, que en 1996 fue declarada monumento nacional y esto bloqueó la puesta en valor (el municipio tuvo que enviar a la Nación una propuesta de manejo y ahora están definiendo un proyecto con Cencosud). Por eso, en el caso de la Tomba elaborarán un plan de recuperación con la empresa Pedro López e Hijos, y determinarán en forma conjunta qué destino tendrá el edificio, qué se podrá reciclar y qué no, y si será posible construir algo nuevo.
En forma paralela, la empresa le encargó al arquitecto Javier Emili que elaborara un proyecto para devolver su apariencia original a la bodega. La propuesta contempla la preservación de las fachadas internas y externas para crear un paseo de compras del estilo de Galerías Pacífico (en Capital Federal) y una sala de degustaciones en la cava subterránea. De todas maneras, hasta ahora sólo cuentan con un inversor interesado, por lo que se avanzará en la estructura ubicada sobre calle San Martín.
Por otra parte, la Municipalidad solicitó la cesión de la nave ubicada al este del terreno para desarrollar actividades culturales. Nardechia señaló que han pensado instalar allí el museo de la ciudad de Godoy Cruz, una feria de artesanos y un sector de uso comunitario.
