Según un reciente informe del Banco Mundial (BM), los efectos de la crisis internacional serán considerables el año próximo, teniendo en cuenta que se espera una caída del 2,1% del comercio mundial.
Este dato es preocupante, ya que significaría la primer baja desde 1982.
La Argentina no permanecerá ajena a este duro escenario para el comercio exterior. De hecho, según el Relevamiento de Expectativas de Mercado que elabora el Banco Central (BCRA), para el año próximo se proyectan ventas al exterior por u$s69.300, un 5% por debajo de los cerca de u$s72.800 que se lograrían este año.
La causa principal de esta disminución se sustenta en el nivel de precios que se proyectan para las commodities, alejados de los récord sin precedentes que marcaron hasta el mes de julio.
Al respecto, según datos del IERAL, de mantenerse los actuales precios de las materias primas, 2009 marcará una caída de 33% respecto del promedio de 2008.
“La Argentina se encuentra en el momento de mayor apertura comercial de los últimos años. Evidentemente los shocks externos tienen fuertes impactos en la economía local y una caída del comercio mundial para el año próximo es una mala noticia tanto para el sector externo argentino como para el sector fiscal”, alertaron desde la consultora.
En este contexto, desde Abeceb.com revelaron que, este preocupante escenario ya comenzó a perfilarse en octubre, cuando 18 de 24 provincias sufrieron una desaceleración de sus ventas al exterior.
De ese total, cinco se vieron perjudicadas con una caída interanual de los valores.
Según el estudio de la consultora, la crisis “se acentúa en nuestras economías regionales cuya oferta exportable se encuentra orientada a la explotación de sus dotaciones naturales de recursos, que en momentos de bonanza permitieron gozar de mayores ingresos a estas economías, que hasta pudieron darse el lujo de cerrar la exportación en un momento donde los precios de los commodities se encontraban por las nubes”.
Sin embargo, con el fin del viento de cola, la situación cambió de manera considerable: “El desmoronamiento de los precios de las materias primas desde fines de septiembre y principios de octubre, producto de las fuertes turbulencias en el mercado financiero internacional y sus efectos en la demanda real de bienes desde los países más afectados, han cambiado radicalmente el escenario para los países exportadores de materias primas y sus derivados”.
Un ránking preocupante
Frente a esto, las provincias más perjudicadas hasta ahora son Santiago del Estero y Catamarca.
“Las provincias que se llevaron la peor parte en términos de ingresos por exportaciones ante los primeros coletazos de la crisis quedan en evidencia ante su menor diversidad de productos”, explicaron los expertos.
Según Abeceb.com, en el caso de Catamarca –que sufrió la caída más profunda-, “la dependencia de las exportaciones del cobre de esta provincia hace revertir su suerte ante períodos de desplome en los mercados de dicho producto y su precio internacional. De hecho, el 90% de sus ventas externas corresponden a este producto”.
En el caso de Santiago del Estero, “la concentración en los porotos de soja también hizo sentir los vaivenes del mercado”.
El 53% de sus exportaciones corresponden a dicho grano, que en el mes de octubre sufrió una caída interanual del 26,5% en valores.
Por su parte, Santa Cruz, Santa Fe y Salta también sufrieron caídas aunque más moderadas, esto es en torno al 2%.
En el caso de Santa Fe, la concentración en el complejo sojero es mayor, donde las caídas para las exportaciones de estos productos se dan principalmente en volúmenes.
“Entre harina, aceite y porotos de soja representan más del 63% de las exportaciones de esa provincia y esos dos últimos productos han sufrido una caída en cantidades de entre 45% y 50% en cantidades”, explicaron desde Abeceb.com.
Pero no todas las noticias resultan negativas. De hecho, hubo jurisdicciones que incrementaron sus exportaciones en octubre por sobre su tasa de crecimiento acumulada hasta el mes anterior.
“Se destacan los casos de Misiones donde prevalecen las ventas de madera a Brasil, Neuquén que todavía no habría sentido las caídas del precio del crudo, aunque presenta signos de vulnerabilidad por su alta dependencia y Corrientes por las ventas de arroz a Brasil y resto de Latinoamérica”, explicaron.
Perspectivas: las que más pueden ser impactadas
En lo que se refiere a las expectativas, a pesar de estar bien ubicada en lo que va del año, Neuquén es la provincia más expuesta a la crisis.
“Por la vía indirecta de caída de los precios internacionales, Neuquén es la más sensible por su alta concentración en las exportaciones de petróleo y derivados, cuyos precios se han desplomado en los últimos meses y difícilmente regresen a los picos observados este año. Se espera una caída en el precio de más del 30% respecto al promedio de 2008, esto se complementa con la concentración en Frutas y Hortalizas, cuyos precios también resultarían menores a los de este año, aunque la caída de estos últimos sería más moderada.
Catamarca, que ya mostró signos del impacto, también es de las que más se vería perjudicada en 2009 dada su alta dependencia de las ventas de cobre, el cual sufriría caídas de precio incluso mayores que las del petróleo y a diferencia de otras provincias, no presenta posibilidades en el corto plazo de diversificación en otros grupos de productos.
A modo de conclusión, desde la consultora explicaron que “la especialización de las economías regionales hacia la explotación de sus dotaciones naturales de recursos, sin duda ha favorecido el reflorecimiento de sus economías estos dos últimos años en la medida que vieron incrementados sus ingresos por exportaciones favorecidas por los altos precios. Sin embargo, se ven revertidos en períodos de precios relativos más deprimidos”.
En esas situaciones, “la especialización ‘eficiente’ dada las dotaciones de recursos naturales muchas veces condena a las economías a los vaivenes de los precios internacionales de su producto. De hecho, en este ejercicio las provincias que presentaron menor sensibilidad fueron las que tienden a la diversificación de sus exportaciones hacia productos de mayor valor agregado”.
