Los supermercados chinos de la ciudad de Buenos Aires y el conurbano bonaerense no comprarán más tomates a los proveedores mayoristas hasta que el producto no baje su precio, que superó los $ 15 el kilo al público en los últimos días.
El anuncio lo realizó la Cámara de Autoservicios y Supermercados propiedad de Residentes Chinos (Casrech) por medio de un comunicado, en el que precisó que “570 supermercados de origen chino, ubicados en la Capital Federal y el Gran Buenos Aires, dejarán de comprar momentáneamente tomate para su sector verdulería, hasta tener éste un precio razonable para la venta”. La entidad expresó que la decisión se tomó “ante la constante alza inflacionaria de productos del rubro verdulería, más precisamente del tomate, y haciéndonos solidarios con nuestra clientela, a la que les pedimos nuestras disculpas”.
Cámaras comerciales y entidades defensoras de los derechos de los consumidores llamaron a un boicot. “Debido al alza desmesurada del precio de venta al público del tomate en las verdulerías, las asociaciones de consumidores decidimos convocar a un boicot a la compra del producto a realizarse entre el día lunes 8 y el viernes 12 de octubre próximo”, señalan en un comunicado el Centro de Educación al Consumidor (CEC) y Deuco, entre otras.
