El presidente de Iveco Argentina, Fernando Fraguío, pronosticó para 2010 una producción automotriz de 750.000 vehículos, durante su intervención en la 13a. Conferencia Industrial Argentina organizada por la UIA en Pilar.
“Nos estamos lanzando a una etapa de enorme desafíos, después de haber barrido todos los récord de 1998, con fuertes metas al 2010, las que veremos exitosas gracias a las inversiones que tenemos puestas hoy”, aseguró el ex presidente de la Asociación de Fábricas de Automotores (Adefa).
El directivo afirmó que el sector “no se conforma con el actual crecimiento” y por ello va por más: “Buscamos para el 2010 una producción de 750.000 unidades”.
Destacó además el crecimiento en la participación de la producción nacional dentro de las ventas locales.
“La tendencia nos lleva a que el 50 por ciento de la cantidad de autos que se vende en la Argentina sea de producción nacional”, ejemplificó, y proyectó que en los próximos años esa cantidad de autos pasará de 50 a 60 por ciento.
Hoy la industria automotriz está dirigiendo su producción a 84 países; no obstante, los destinos principales siguen siendo Brasil, Chile, México y Venezuela. Acerca de las unidades exportadas, Fraguío señaló que “son productos de alta sofisticación; autos modernos”.
El empresario reconoció que “alguna vez miraron con preocupación la relación comercial con Brasil” y frente a ello entablaron con el gobierno “un intercambio que sea justo y equitativo”.
Pero las mejoras del sector, vía el ingreso de nuevos modelos de producción exclusiva en el país, llevaron a que “los parámetros se ubicaron de tal forma que no necesitábamos de ese parámetro”, afirmó y agregó que “lo que se exporta e importa con Brasil está equilibrado”.
Fraguío planteó el interrogante de cómo atraer inversiones y recordó que sobre un total de 16.500 millones de dólares que se invertirán en los próximos años en el mundo automotriz, unos 3.500 millones se radicarán en la Argentina.
Así, tal como anticipó Télam el mes pasado, el 20 por ciento, al menos, será en inversiones directas para el autopartismo nacional.
En ese sentido, el titular de Iveco reconoció que “no puede haber una industria automotriz fuerte si no hay una industria autopartista fuerte”, al tiempo en que insistió en el “alto grado de empleabilidad” de este sector.
